Una pared y acera mojada fue la cama para 16 padres este 27 de abril. El grupo llegó a las 9:00 am al Circuito Judicial de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes de Caracas para iniciar una huelga de hambre con la que exigen a las autoridades que escuchen sus demandas. Se trata de 12 mujeres y 4 hombres que perdieron el contacto con sus hijos, algunos desde hace más de cuatro años.
“Representamos a más de 60 padres que en este momento tienen algún tipo de sustracción de sus hijos; ya sea que fueron sacados del país o son víctimas de alienación parental. El problema con estos casos es que tienen un velo de supuesta legalidad”, explicó Martín Geymonat, director de la Fundación Venezolana de Niños Sustraídos, Detenidos o Desaparecidos (Funvenides). El grupo durmió en el lugar a espera de una respuesta.
Las situaciones mencionadas por Geymonat se encuentran en la Ley Orgánica de Protección de los Niños, Niñas y Adolescentes (Lopnna). En el artículo 272 explica que quien sustraiga a un niño, niña o adolescente del poder de quien lo tenga por virtud de la ley u orden de la autoridad, será penado con prisión de seis meses a dos años. En la misma pena incurre quien retenga indebidamente a un niño, niña o adolescente.
Por otro lado, el término alienación parental hace referencia a distintas estrategias de engaño, manipulación o acción aplicadas a un niño por un padre o madre custodio con el objetivo de obstaculizar los vínculos hacia el otro progenitor. Estos actos de alienación parental tienen una implicación judicial: lograr que el niño rechace o se aleje injustificadamente al padre o madre que no tiene su custodia legal. En el artículo 389 la Lopnna aclara que quien obstaculice el disfrute del régimen de convivencia podrá ser privado de la custodia.
El director de Funvenides explicó que la mayoría de los casos que llegan a la organización tienen una orden judicial emanada arbitrariamente. “Las mujeres que están hoy en huelga de hambre fueron denunciadas por hechos falsos de violencia intrafamiliar. Sin pruebas y sin elementos de convicción, violando la presunción de inocencia, un tribunal dictó una medida cautelar con la que las alejaron de sus hijos”, manifestó Geymonat a la Agencia de Periodistas Amigos de la Niñez y Adolescencia (Agencia PANA).
Otra de las irregularidades reportadas es el tráfico internacional de niños. De acuerdo con la Convención Interamericana sobre Tráfico Internacional de Menores de la Organización de Estados Americanos (OEA), este delito está relacionado con la sustracción, el traslado o la retención, o la tentativa de sustracción, traslado o retención, de un niño con propósitos o medios ilícitos. A su vez, aclara que un medio ilícito incluye, entre otros, el secuestro, consentimiento fraudulento o forzado y la entrega o recepción de pagos con el fin de lograr el consentimiento de los padres.
Lea también: ¿Instituciones Familiares?, una guía para la responsabilidad de crianza de padres separados
Exigencias de los padres
Funvenides inició con la confluencia en Fiscalía y tribunales de siete padres que entendieron que no eran los únicos con trabas judiciales para que sus hijos disfrutaran del derecho a la familia. En 2018 se organizaron y hasta 2021 tienen a 66 padres registrados.
En estos tres años han acudido como agrupación a Ministerio Público y Cancillería de Venezuela, ente encargado de la restitución familiar cuando los niños son sacados del país.
Esta es la primera huelga de hambre que realizan y tienen claras sus exigencias:
- Que se establezca contacto de los niños con sus padres, “así sea por videollamada”.
- Que se restituya el régimen de convivencia familiar establecido.
- Que se fijen las audiencias. “En la mayoría de los casos las audiencias no tienen fecha ni juez asignado, desde hace más de un año”, aclaró Geymonat.
Pese a la claridad de su solicitud, las autoridades se han negado a reunirse con ellos. Según narró el representante de Funvenides, un funcionario de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) intentó desmantelar la huelga a cambio de que el grupo entregara una carta. Ellos se negaron.
Al final de la tarde de este 27 de abril, a Geymonat se le permitió el paso al Circuito Judicial de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes de Caracas. Dentro fue recibido por la coordinadora del circuito, Katiuska Pérez. “Me dijo que solo me iba a recibir la carta, pero que no se iba a sentar con nosotros porque no iba a caer en manipulaciones”, agregó.
Hasta las 10:00 am del 28 de abril, el grupo de manifestantes permanecía frente a la sede judicial sin custodia policial. Solo un grupo de sacerdotes los acompañaron durante la noche para brindarles apoyo y no han podido reunirse con autoridades del circuito.
