Relaciones de noviazgo en la adolescencia, ¿sí o no?

adolescentes actividad física

En un reciente conversatorio que realizamos en Cecodap sobre la violencia en el noviazgo entre adolescentes, uno de los participantes preguntó por el chat del Zoom si deberían existir relaciones de noviazgo en la adolescencia.

Muchos pensamos que Romeo y Julieta eran jóvenes adultos y no se nos ocurre pensar que una de las más famosas parejas de la literatura universal estaba compuesta por un adolescente entre 16 y 18 años y una chica sobre los 13 años. La Bella Durmiente tenía 16 años cuando se quedó dormida esperando a su príncipe.

Muchas de nuestras bisabuelas y abuelas se casaron siendo adolescentes. Nuestros abuelos en la mayoría de los casos ya eran adultos. Los patrones culturales y expectativas de vida más cortas hacían que las uniones comenzaran antes; aunque había bastantes restricciones para verse, tomarse la mano y menos darse un beso.

Dependiendo de la realidad social y cultural hay miles de adolescentes que inician relaciones e incluso uniones con embarazos incluidos. En otros casos, se considera que el noviazgo es una amenaza al desarrollo del proyecto de vida y que las relaciones sentimentales se deben dejar para después de obtener un título.

Las hormonas no esperan

La realidad nos indica que la edad de la iniciación sexual en nuestros días ha ido bajando. Ya con la adolescencia, incluso antes, comienzan a tener experiencias respondiendo a los “mandatos de su cuerpo”. Las altas cifras de embarazo adolescente en nuestro país lo corroboran.

El que no hablemos de ello no quiere decir que no ocurra. Admitir que se deben preparar para las relaciones es un buen comienzo. En el liceo o en la comunidad socializan y comienzan a tener relaciones afectivas que los van formando su emocionalidad. El pediatra Ron Eagar ve en las citas grupales, por supuesto en tiempos en que la pandemia lo posibilite, un espacio para que los adolescentes “puedan disfrutar de la compañía sin la incomodad y la presión que puede invadir las citas a solas o salida en parejas”.

Ni tan calvo ni con dos pelucas

También es cierto que tenemos hogares donde los adultos comienzan a presionar a sus adolescentes: “¿y tú cuando vas a traer una novia a la casa?”, “no quiero que te quedes para vestir santos”.

El otro extremo, la primera cita a solas “cuando tengas independencia económica, finalices el posgrado, tengas tu propia vivienda, cumplas los cuarenta”.

Eagar aconseja no permitir una cita a solas antes de los 16 años. Indica que es importante considerar las características del adolescente y si otras familias también lo hacen.

El primer amor nunca se olvida

Muchas familias se burlan de esa primera relación y ridiculizan ese primer amor. El pediatra George Comerci señala que “es una relación muy importante para los adolescentes y es importante ya que es la primera relación íntima con alguien fuera de la familia”

La adolescencia es una etapa de socialización y experimentación y tal como le señala el Instituto Aguascalentense de la Mujer (México) a los adolescentes:

“Si todavía estás en la secundaria o en la preparatoria, es decir, entre los 12 y los 18, mejor no te involucres en nada demasiado serio. Sal con amigos, diviértete y date la oportunidad de conocer. De esta manera podrás saber exactamente lo que buscas, qué tipo de noviazgo quieres y cuáles son las cualidades que consideras indispensables en tu pareja. Sólo así tendrás un punto de comparación. Acuérdate de esto: algún día, tarde o temprano, te llegará el momento de tener novio o novia. Sin embargo, ahora es tiempo de hacer amigos, de conocer gente, de divertirse sanamente… no lo cambies por algo que de todos modos llegará”.

Como padres quisiéramos evitarles el dolor a nuestros hijos, que no cometan los errores que nosotros o familiares cometimos. Pero no lo vamos a lograr sobreprotegiéndolos o evitando que se relacionen; sino acompañándolos para que tengan las habilidades sociales y emocionales para enfrentar el reto de crecer y vivir.