Suspensión salarial, persecución a docentes y retraso en el contrato colectivo. Para Gricelda Sánchez, presidenta de Formación para la Dirigencia Sindical (Fordisi) y miembro del Sindicato de Maestros de Venezuela, estas razones para firmar que la ministra para la Educación arremete contra la clase trabajadora que labora en las diferentes escuelas públicas en el país.

Este jueves 14 de julio un grupo de profesionales de la docencia acudió a las puertas del Ministerio para la Educación en Caracas para exponer sus denuncias. Aseguran que la gerencia de Yelitza Santaella establece «políticas criminales». Una de ellas es las suspensión de salarios.

Según la gremialista, el ente rector en materia educativa inicio la “inspección de las nóminas”, en búsqueda de educadores que hayan salido del país en los últimos años. «Entre esos 3.000 docentes suspendidos, se encuentran mujeres embarazadas o profesionales en reposo. Hoy incluso yo, dirigente sindical, tengo el salario suspendido.

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Dice que la plantilla de docentes se redujo 50% en los últimos años, debido a la calidad de vida disminuida que tienen estos profesionales. Además de esta realidad, el despido de profesores fue denunciado por Sánchez: «El Ministerio está sacando gente para meter a personas que no están formadas, que pueden manipular porque los profesores formados se han ido».

Destacó que la falta de maestros del país se evidenciará en el próximo año escolar 2022-2023, en donde la mayoría de las instituciones públicas tienen falta de profesores en materias de ciencia, humanidades y deporte. “No hay maestros de matemáticas, incluso los profesores de educación física se están yendo. Adicionalmente, vemos cómo los maestros son perseguidos y criminalizados por no estar alineados a los mandatos gubernamentales”, agregó.

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Sánchez enfatizó que la gestión de la ministra Santaella solo ha ocasionado daños al sistema de educación pública en el país. “Se dedicó a destruir la educación del país. Por eso hoy pedimos la renuncia de la ministra Yelitza Santaella a su cargo. Nicolás Maduro debe solicitar la renuncia lo antes posible”, sostuvo.

Sánchez explicó que sólo 50% del pensum escolar se cumplió entre 2021 y 2022 por parte de los docentes, debido a que las condiciones en los colegios no eran óptimas para dar las materias; sumado a la falta de docentes. “Vemos cómo a los estudiantes los pasan a grados superiores sin saber leer o tener comprensión lectora, así como con fallas en las materias como matemática. Todo esto está atado a la falta de planificación y lineamientos por parte de la ministra Santaella”, sostuvo.

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La sindicalista sostuvo que la infraestructura de 21.400 mil planteles públicos en el país está en malas condiciones. “No se está impermeabilizando, no se contratan a los ingenieros competentes. Se caen y aun así el Estado no hace nada”, destacó.

Agregó que: “La ministra Yelitza Santaella se ha encargado de decirle a los trabajadores que no le van a cancelar los salarios caídos, por eso, nosotros pedimos que nos expliquen dónde está el salario de los maestros”.

Sánchez sostuvo que entre las exigencias de los maestros al Ministerio para la Educación es la derogación del instructivo de la Oficina Nacional de Presupuesto (ONAPRE); así como que funcione correctamente el Instituto de Previsión y Asistencia Social para el personal del Ministerio de Educación (Ipasme). “Queremos salarios dignos como lo establece el artículo 91 de la Constitución”, señaló.

Sánchez informó que próximamente desde su organización publicarán un informe con todas las denuncias recolectadas de los maestros sobre la situación de las instituciones educativas, personal administrativo y docente.

Un balance negativo para la educación

Fallas de servicios públicos, estructuras deterioradas y ausencia de maestros encontraron a los niños, niñas y adolescentes con el retorno a clases presenciales.

La Agencia de Periodistas Amigos de la Niñez y la Adolescencia (Agencia PANA) y Cecodap convocaron a 10 periodistas para la documentación de los datos, realizada a través de encuestas y entrevistas en diferentes escuelas, tanto públicas como privadas, para retratar la situación escolar.

A partir de once reportajes y con la participación de 151 personas, de las cuales 39 fueron niños, niñas o adolescentes se logró una aproximación sobre las condiciones, metodologías y realidades en el regreso a las aulas. Este proceso de análisis permitió identificar un patrón de adversidades y omisiones del Estado que comprometen el derecho a la educación de los niños, niñas y adolescentes.

Filtraciones, techos caídos, baños inoperativos, falta de pupitres y un precario acceso a servicios públicos especialmente de agua potable, aguas servidas, gas doméstico y electricidad. “La precariedad en la estructura escolar conlleva a unir salones de clases, improvisar espacios o dar clase en espacios sin techos”, se lee en el informe publicado por Cecodap y la Agencia PANA.

A los problemas en las escuelas se le sumó la deserción de docentes, no solo en áreas científicas (como puede ser matemática, física y química), también en la educación básica. Se identificó en el trabajo de campo que el 66% de los centros educativos públicos y 34% de los centros educativos privados tiene déficit de docentes. La ausencia de docentes obedece a diversas causas principales: bajos salarios y sobrecarga de trabajo, falta de transporte público e infraestructura que limita el desarrollo de una dinámica escolar de calidad.

El estudio ahondó en cómo se daba solución a este problema. El 63% de los centros educativos encuestados cubren la falta de docentes con personal ya jubilado, profesionales distintos al área de la educación pero con componente docente y en algunos casos un docente puede asumir varias asignaturas o grupos de alumnos.

“Llama la atención que el 37% de los centros educativos encuestados intentan cubrir la falta de docentes con otro tipo de personas pero sin formación pedagógica o simplemente no cubren las vacantes”, resalta el informe.