Preguntas y respuestas más frecuentes en tiempos de COVID-19

PREGUTNAS respuestas coronavirus COVID-19

Estamos en una pandemia por el COVID-19, bajo medidas de cuarentena y distanciamiento social. Razón por la cual el funcionamiento regular de la consulta de psicología que atendemos en Cecodap ha tenido que adaptarse al contexto.

Ofrecimos nuestras redes sociales como un canal a través del cual plantear dudas, consultas y comunicarnos para pensar en alternativas que nos ayuden a mantener la salud mental y la convivencia en casa.

Fueron muchas las preguntas. He seleccionado cinco de ellas que pueden ser de utilidad para todos.

Mi hijo tiene miedo por el coronavirus, me preocupa que esto deje secuelas en él, ¿qué hago?

El miedo es una respuesta normal. Adultos y niños también podemos sentirlo.

Las secuelas pueden aparecer sobre todo cuando no somos capaces de hablar y gestionar esa emoción.

Una de las alternativas más efectivas que podemos implementar es hablar de cómo nos sentimos. Cuando se trata de niños, esto puede implicar el uso de dibujos y juego.

Así mismo, es fundamental poder complementar con información adecuada a la edad, que le permita entender lo que vive y lo que esperamos de él.

Tengo un hijo adolescente en casa y no sé qué hacer en estos días

Muchas veces como padres no sabemos qué hacer con los adolescentes, porque nos preguntan, cuestionan y retan. Incluso, como adultos si nos imponen condiciones que no entendemos o que no creemos que puedan afectarnos probablemente también opondríamos resistencia.

Es normal que los adolescentes cuestionen y duden de las referencias que como padres podemos ofrecerles y más que invitarte a que le des a tu hijo una gran explicación, te planteo que le hagas preguntas sobre el virus, sus formas de contagio u otras que le lleven a reflexionar sobre la situación y su impacto.

Si tu hijo logra darse cuenta por sus propios medios actuará con convencimiento y será una fuente de apoyo.

Tengo dos niños pequeños y no quieren comer las opciones que tenemos en casa y no sé qué hacer

En días como estos nos preocupa la alimentación. Quizá no dispongamos de una gran variedad de opciones y como adultos podemos adaptarnos a pesar de que no nos guste la idea. Con los niños es más complejo, puesto que quizá no comprenden todas las razones que como adultos manejamos para hacer los ajustes correspondientes.

Es probable que tus hijos estén pensando en lo que ellos quieren, sin poder comprender las razones tras las limitaciones que existen. Una alternativa que puedes implementar es ofrecer dentro de las opciones que tienes dos opciones y permitirle a tus hijos elegir entre ellas. A veces puede ser la misma comida presentada de una forma diferente (como se ve hace una gran diferencia desde el punto de vista de los niños).

El acto de elegir aunque sea entre opciones que como adultos controlamos les permite sentirse a gusto y tomados en cuenta.

Este es un ejemplo de límites sin necesidad de decir «¡no!». Lo que hacemos es limitar las opciones disponibles, pero ofreciendo opciones a nuestros hijos para participar.

Mi hija adolescente quiere ir a jugar con sus amigos en la cancha, ¿cómo hago para que entienda que es peligroso y debe estar en cuarentena?

Para los adolescentes la vida social es clave, podríamos decir que es el centro de su universo y cuando esto se ve afectado de alguna manera podemos experimentar momentos de crisis en casa.

Es muy importante verificar si nuestro hijo realmente entiende las implicaciones de la COVID-19. Puede que no se sienta población vulnerable y por tanto crea que puede salir con libertad.

Sin embargo, es muy importante ayudarle a ver cómo puede ser un vehículo para el contagio del virus aun sin síntomas. Para hacer esto puedes hacerle algunas preguntas y ofrecerle información. En la respuesta anterior consideramos este tema. Inclusive, puedes invitarle a que investigue por sí misma para que no vea esto como una imposición.

Es fundamental tener la flexibilidad suficiente para ofrecerle alternativas virtuales que sirvan para mantener el contacto con sus amigos, con ciertos márgenes de privacidad (aunque no dejemos de supervisar y proteger).

Mi hija de siete años está desesperada por salir. Me dice insistentemente que quiere jugar conmigo, ¿qué hago?

Es normal que exista un deseo de salir, de descargar energía. Especialmente cuando nuestros hijos son pequeños. Sin embargo, sabemos que hay limitaciones para ello en estos días. Es recomendable consultar si tienes disponible videos en YouTube sobre entrenamiento de padres e hijos y posiblemente puedas encontrar algunas alternativas divertidas para mantener la condición física de ambos y canalizar la energía.

Por otra parte, el juego es una de las principales herramientas con las que cuentan los niños para procesar emocionalmente las situaciones, por tanto el juego debe ser prioritario dentro del día a día de los niños. Es clave poder incluir dentro de las rutinas diarias momentos de juego, incluyendo espacios de juego compartido.

Al definir estos espacios nuestros hijos aprenderán a identificar cuál es el momento en que podrá contar con toda mi atención, siendo capaces de esperar a dicho instante. Esto demanda de nosotros honrar nuestra palabra de forma tal que podamos generar confianza. Una vez que instalemos esta rutina veremos que bajan los niveles de ansiedad con respecto al juego y también seremos capaces como adultos de programar actividades propias.