Siete consejos para padres y madres separados en tiempos de cuarentena

familias separados padres divorcio (1)

Convivencia familiar es el derecho que tiene tanto el padre o la madre de mantener relaciones de afecto con sus hijos, al igual que comunicación y contacto permanente. Esta figura adquiere mayor relevancia en los casos en los que papá y mamá están separados y tienen residencias diferentes.

La convivencia familiar es la posibilidad de establecer cualquier forma de contacto entre el niño y el padre o madre, que no vivan permanentemente con él. Este derecho de contacto se concreta mediante visitas en la residencia del niño, conduciéndolo a lugares distintos (escuela, parques) o cualquier otra forma de comunicación electrónica como podrían ser videollamadas y mensajes. 

Una cuarentena como medida sanitaria, frente a la propagación de la COVID-19, alteró la dinámica de las familias. Más aún la forma cómo los padres y madres que están separados comparten y se comunican con sus hijos.

En cuarentena se busca evitar salir de casa a menos que sea estrictamente necesario y solo para cubrir necesidades básicas. Por esta razón, surge entre los padres y madres la duda de qué hacer ante esta situación.

Lea también: Recomendaciones para manejar la cuarentena con niños en casa

En los casos de padres separados es necesario tomar en cuenta lo siguiente:

  1. Se trata de un derecho compartido de contacto y comunicación que tienen los padres hacia sus hijos, pero también los hijos hacia sus padres.
  2. Ambos progenitores tienen que velar primordialmente por la seguridad, salud, protección, integridad de sus hijos, por tanto, se debe evitar traslados o lugares que representen riesgos.
  3. Los niños, niñas y adolescentes tienen mucho que decir. Escuchar su opinión sobre cómo quiere mantener el contacto con su papá o mamá es importante. Sus opiniones nos pueden ayudar a tomar mejores decisiones.
  4. Se debe privilegiar que ambos padres, en función a la seguridad del niño, puedan llegar a un acuerdo. Si de forma temporal esto implica algún cambio en los acuerdos previamente establecidos, puede y debe ser negociado. Eso sí, una rutina de convivencia o un horario preestablecido no puede ni debe colocar al niño ni a sus padres en riesgo.
  5. De ser necesario y de no alcanzar un acuerdo entre los progenitores, podemos solicitar la conciliación de los consejos de protección municipales.  Se debe acudir al que corresponde al lugar de residencia del niño. A pesar de la cuarentena los consejos de protección de niños, niñas y adolescentes deben mantener un sistema de guardias permanentes.
  6. En el caso de haber traslados, se deben tomar las medidas de seguridad recomendadas . Por ejemplo el uso de tapabocas y gel antibacterial. 
  7. Se puede recurrir al uso de vías alternas de comunicación como llamadas telefónicas, las videollamadas y los mensajes. Esto puede activarse si es imposible establecer contacto presencial entre el padre o la madre con el hijo.

Hoy nos toca como familias afrontar una situación inédita. En estos momentos debemos buscar los puntos comunes y de encuentro que nos permitan garantizar a los niños, niñas y adolescentes un espacio seguro, afectivo y protector.

Con información de Carlos Trapani.