Un gran incendio consumió este lunes los depósitos del Instituto Venezolano de Seguros Sociales (IVSS) en Antímano, al oeste de Caracas. La ministra de Salud, Magaly Gutiérrez Viña, informó que en el lugar se almacenaban insumos para los programas de hemodiálisis y diálisis peritoneal para atender a más de 7.000 pacientes en todo el territorio nacional.

Ambos tratamientos son administrados a pacientes renales. La diálisis peritoneal es un tratamiento para la insuficiencia renal que utiliza el revestimiento del abdomen o vientre del paciente para filtrar la sangre dentro del organismo. Es un procedimiento domiciliario. Por su parte, la hemodiálisis es un tratamiento para filtrar las toxinas y el agua de la sangre, como lo hacían los riñones cuando estaban sanos.

¿Cómo afecta esto a la niñez y adolescencia?

«Es lamentable y doloroso por los pacientes que resultan afectados por este hecho. Indispensable que desde el Ministerio de Salud se informe las medidas que se adaptarán para garantizar la continuidad del tratamiento a todos los pacientes, especialmente a los niños y niñas», menciona Carlos Trapani, coordinador general de Cecodap, en su cuenta de Twitter.

Los pacientes con enfermedades renales crónicas se han visto golpeados por la situación de escasez de medicamentos y daños estructurales en los hospitales desde 2015. Aunque se desconoce cuántos niños, niñas y adolescentes reciben diálisis en Venezuela, Prepara Familia indicó a El Diario que solo en el Hospital J.M de los Ríos hay seis hospitalizados y 14 en hemodiálisis. Con los que solo van a consulta en ese centro asistencial, suman un total de 30 pacientes pediátricos a la espera de un trasplante renal.

«La situación de los niños que están en Nefrología en el Hospital J.M. de los Ríos (Caracas) es complicada porque muchos han salido de la unidad con un catéter especial para recibir diálisis peritoneal, pero así no tiene forma de garantizar un protocolo perfecto. Algunos han regresado con infecciones y con la necesidad de hemodiálisis”, apuntó en entrevista para El Diario.

Lea también: Suspensión del programa de trasplantes perjudica a 150 niños en los últimos cuatro años, estima ONTV | COMUNICADO

Otro factor que pone en riesgo la vida de los pacientes pediátricos con patologías renales fue la suspensión de trasplantes. En junio de 2022 se cumplieron cinco años del cierre del Sistema de Procura de Órganos y Tejidos (SPOT), con el que se podía hacer un trasplante de órganos de un donante fallecido a un receptor en lista de espera.

En el año 2017, cuando la Fundación Venezolana de Donaciones y Trasplantes de Órganos, Tejidos y Células (Fundavene) tomó la decisión de paralizar la procura de órganos, las autoridades nacionales de salud argumentaron que sería temporal y que respondía a fallas en los centros asistenciales y el abastecimiento de medicamentos. Originalmente esa suspensión duraría dos meses.

La Organización Nacional de Trasplantes de Venezuela (ONTV) señala que, luego de cinco años, la situación de la procura de órganos no ha cambiado en lo absoluto. La institución, que dirigió el SPOT hasta 2014, alertó que tanto los servicios en los hospitales como el suministro de medicamentos continúan fallando.

Cifras de Organización Amigos Trasplantados de Venezuela (ATV) indican que desde 2017 a la fecha se han visto afectadas más de 1.200 personas, de las cuales 150 son niños, niñas y adolescentes según la ONTV. Además Prepara Familia ha contabilizado la muerte de 70 niños, niñas y adolescentes, pacientes del Hospital J.M. de los Ríos, desde que se suspendieron los trasplantes.

La paralización de estos procedimientos implica que miles de pacientes continúen en diálisis después de años de haber sido diagnosticados con un síndrome nefrótico. Muchas de las unidades de diálisis no cuentan con cupos para pacientes nuevos a menos que muera alguna persona que recibe el tratamiento. Pese a que las diálisis mantienen estables a los pacientes renales, también producen un deterioro en sus cuerpos, especialmente en los huesos.

La ONTV y otras organizaciones no gubernamentales como Prepara Familia siempre han considerado que se debe dar prioridad a niños, niñas y adolescentes cuando haya una reactivación total de los programas de trasplantes y procura de órganos. Katherine Martínez, abogada y directora de Prepara Familia, aseguró que trasplantar a los pacientes renales pediátricos es darles una oportunidad de prolongar sus vidas. También frena el deterioro causado por las diálisis.